Naturalmente, el café es, ante todo, una bebida. Por nuestra parte, no hemos intentado describir los innumerables métodos de elaboración del café que se usan en el mundo. En su lugar, hemos elegido algunas formas de preparar una taza de café, formas que pueden considerarse clásicas. Citamos, a título de ejemplo, el capuchino o el café irlandés. El aroma excepcional y embriagador del café puede acompañar a un buen número de platos tradicionales de una manera original y sabrosa. Pero las recetas que combinan originalidad con delicadeza son relativamente raras cuando el café ha de dar su gusto y su sabor a una carne o a una salsa.
 
Volumen en  tapa dura
Formato 24 x 29 cm
242 páginas impresas a todo color
Excelentes fotografías